El nerviosismo era evidente
Seria el centro de las miradas por un buen rato, y estaría a evaluación cada uno de mis movimientos.
“Ser natural”...
Lo único que se me ocurrió.
Recordaba años atrás, donde el ser natural no era suficiente, y el solo hecho de no ser rubio de ojos azules o verdes, me valió una desaprobación de entradita, la que no cambio nunca.
Acá fue distinto.
Me di cuenta que no existían dobles estándares, la gente del Sur en su humildad rebosaba una riqueza en sabiduría y sinceridad, que a algunas familias Santiaguinas les falta a mas no poder.
El solo hecho de saber que estas conversando con alguien, que no esta pensando en evaluarte en conocimientos, o por lo que tienes, es reconfortante.
Me sentí demasiado bien.
Los días se hicieron cortos.
Empanadas de horno de barro.
Huevitos recién puestos.
Despertarse en la mañana con el canto de un gallo.
Me recordaron mi niñez, y nuestra ex – casa con gallinas y todo.
Buen 18.
1 comentario:
que lindas fotos....
pero mas lindo fue el cometario, ya q la gente se valora por lo q es y no por lo que tiene.
un beso tu pelolais campecha
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