Era una tarde de agosto…
Me llego esa invitación a ver esa película, algo me decía que tenia que ir.
Mis llaves sobre el escritorio…
La entrada en la mano.
Quizás fue el hecho que ninguno de mis amigos llego al frontis de la universidad, o que fuera en un plantel ajeno al mío, lo que me motivo a irme…
Pero algo me decía que debía entrar.
Aun así me fui.
Ese día ya corrían los vientos de septiembre.
El cielo era de un azul intenso debido a las lluvias del día anterior.
Camine por republica rumbo no se donde.
Alejándome esa tarde.
Hace 4 años atrás.
Quizás debí quedarme a ver ese día Shakespeare Enamorado.
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Historias de uno que no son de dos (parte 3)
2 comentarios:
Lo más probable es que aunque hubieses estado ahí ese día, a esa hora, no hubise ocurrido lo que ahora deseas...
Siempre nos toca decidir por una cosa u otra, he ahí como vamos modificando nuestras vidas...
Así es como hemos llegado hasta donde estamos, como vamos forjando nuestra historia, con alegrías y penas, altos y bajos, pero nuestra historia al fin y al cabo...
compare Ale,
parece q tenemos que juntarnos
a conversar
;)
si quieres invitas a la persona muy especial que está apareciendo por esos lados...
¿...te tinca esta semana tipín 1 botella de tinto cualquier día... ???
un abrazo socio !!!
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